Estos últimos años se ha pasado a ser archiconocido el Viernes Negro (Black Friday).

A pesar de que ya era popular en Estados Unidos desde los años 60, la globalización y las ventas online lo han llevado a su máxima expresión a nivel mundial estos últimos tiempos.

Han aparecido iniciativas similares como el Cyber Monday o el Día del soltero, este último de tradición oriental, exportado en gran parte por Alibaba y AliExpress.

Estas iniciativas están empezando a pegar fuerte, pero el rey sin ningún tipo de discusión sigue siendo -por ahora- el Viernes Negro.

Muchas son las ofertas y promociones que podemos encontrar en este día (en muchos casos se estira toda la semana).

Pero no todo es oro lo que reluce.

El Viernes Negro entraña una serie de peligros de los que podrías ser víctima.

En este post analizaremos todo lo que gira entorno a este día tan peculiar.

¿En qué fechas se celebra el Viernes Negro?

 

El término Viernes Negro nace alrededor de 1961 como consecuencia del marrón que se encontraban los policías de tráfico de Filadelfia debido a la ingente cantidad de personas y vehículos que poblaban las calles el día siguiente de Acción de Gracias (Thanksgiving).

Desde entonces se celebra cada mes de noviembre justo al día siguiente de Acción de Gracias.

Es la fecha que marca el inicio de la campaña de compras navideñas y a pesar de que no es un día festivo como tal, muchas empresas estadounidenses le dan día libre a sus empleados.

Existe una explicación alternativa al nacimiento de este término, que es la que más se ha divulgado.

Dicen que, gracias a estas fechas los números rojos de las empresas pasan a ser beneficios y por tanto, “números negros”.

Personalmente, prefiero la primera explicación, mola mucho más y para mi tiene más lógica.

¡Quédate con la que más te guste! 😉

 

¿En qué consiste el Viernes Negro?

 

El famoso Viernes Negro -o Black Friday- es el día en que todos los comercios lanzan mayor número de ofertas y descuentos tanto por cantidad como por volumen.

Inicialmente consistía en un único día de ofertas, pero posteriormente se “estiró” todo el fin de semana dando lugar al Cyber Monday.

En los últimos años, los comerciantes han aprovechado el fuerte tirón que tiene este acontecimiento y actualmente la mayoría lo prolongan casi una semana.

Desde liquidaciones hasta descuentos en últimas novedades, el abanico de descuentos es variado y generoso, pero hay que tener cuidado…

 

Aviso para navegantes: No te dejes llevar

 

Jirafa-viernes-negro
No serás ni el primero ni el último que se deje llevar por la fiebre del Viernes Negro, eso lo tengo claro.

Un servidor también suele estar atento a los descuentos por estas fechas, pero tengo una cosa muy clara: No compro una jirafa porque me la dejen a 3 euros.

Está muy bien que los descuentos sean grandes, pero ojo, eso hace que cualquier oportunidad se presente como irresistible para nosotros los mortales.

Y no hay duda de que la gente de marketing hace muy bien su trabajo y que por tanto, cualquier oferta ese día resulta muy golosa.

Pero tú todavía estás pensando a qué c*** venía lo de la jirafa ¿no?

Es una coña que tenemos con mis amigos desde pequeñitos.

En ningún lugar se puede comprar una jirafa -para empezar, imagino que debe ser ilegal- pero si se pudiera sería muy difícil conseguir una.

Y por lo tanto, sería muy cara.

De modo que si te la dejan a 3 euros puedes pensar: “joder, por ese precio me la compro fijo”.

Para cuando ya has comprado esa jirafa, te das cuenta de 2 cosas:

  1. Cuesta una pasta mantenerla.
  2. ¿Para qué narices compraría yo una jirafa?

La respuesta a este último punto ya la sabes: porque era barata. Un chollo.

Comerciantes 1 – Tú 0

¿Me sigues ahora?

No te vuelvas loco con los descuentos, la mayoría de las cosas no las necesitas.

Aprovecha la oferta, pero sólo en cosas que realmente necesites.

 

Consulta precios anteriores

 

Antes de seguir; no diré nombres de ningún comercio porque no me quiero buscar un marrón.

Es leyenda urbana -a pesar de que yo mismo lo tengo comprobado- que algunos comercios suben precios las semanas anteriores para así quedar todo como estaba al aplicar el descuento.

Lo mismo sucede con otros eventos similares como “el día sin IVA” y cosas por el estilo.

No nos considero pardillos porque no podemos estar investigando siempre lo que sucede con los precios en cada lugar semanas o meses antes.

Pero hay herramientas que lo hacen por nosotros.

Puedes encontrar varias de ellas en el apartado ahorro de mi sección de recursos.

Son totalmente gratuitas, de modo que sácales partido y ahora sí, no me seas pardillo.

Una de las más populares es camelcamelcamel, que te analiza los precios de cualquier artículo de Amazon a lo largo del tiempo.

 

¿Lo necesitas o te haría feliz?

 

¿Sabes que hay una diferencia muy grande entre lo que necesitamos y lo que nos hace felices?

Pudiera parecer lo mismo, pero no.

Necesitas comida, un techo donde dormir, sanidad, educación, un coche si trabajas lejos…

Puedes necesitar una lavadora porque se te ha estropeado o un móvil para comunicarte y trabajar (aquí ya te he dado una excusa ¿eh?).

En cambio, te haría feliz un coche más bonito -y por tanto más caro-, unas vacaciones, más ropa, tecnología… ¡Qué sé yo!

¿Ves la diferencia?

Lo que nos hace felices -o mejor dicho, un poco más felices y solo temporalmente- son los caprichos.

Lo que necesitamos nos permite vivir, y a pesar de que la mayoría del tiempo no nos demos cuenta, también nos hace felices pero en una intensidad menor aunque más duradera que los caprichos.

No te digo que no te des caprichos, pero cuidado con eso.

Porque a base de caprichos y gastos innecesarios uno se mete en problemas.

No caigas en la tentación, aprovecha las ofertas, pero solamente para comprar cosas que necesites.

O para las que llevabas ahorrando hace tiempo porque tenías muy claro que querías, eso está bien.

Un ejemplo de buen uso del Viernes Negro es comprar los regalos de reyes.

Es algo que en principio es seguro que vas a comprar, y aprovechar los descuentos en este caso puede ser interesante.

Pero no para cosas que ni sabías que existían y que no te hacen ninguna falta.

Si llevas un control de tus finanzas y dentro de tu presupuesto tienes una partida para tal fin, perfecto.

Si no, olvídalo.

Te recuerdo que esto es un blog de educación financiera, así que vamos a hacer las cosas bien ¿te parece?

 

Puede ser un Viernes Negro muy largo

 

Jirafa-peligro-viernes-negro

 

Por si no fuera peligroso todo lo que te acabo de contar que la gente suele hacer un Viernes Negro, todavía hay una cosa más.

Ebrios de euforia por los descuentos y el consumismo desenfrenado los hay que comenten un último error y que resulta ser el peor de todos.

Se llama tarjeta de crédito.

¿Te suena?

Se tragan todos los argumentos narrados hasta ahora para autoconvencerse de que:

  • Tan irresistible es la oferta…
  • …tan grande el descuento…
  • …y tanta la necesidad (falsa) que tienen de adquirir el producto…

…que aunque no tengan el dinero, vale la pena endeudarse.

Increíble.

“Lo pagaremos en cómodos plazos, no hay problema”.

JA… JA.

Dejando de lado que estoy en contra de contraer deudas por pequeñas que sean -a estas alturas ya me vas conociendo-, todavía lo estoy más de hacerlo por cosas que no necesitas.

Luego llegan los lamentos.

Y un último apunte para los interesados en mejorar su cultura financiera:

Existe una cosa que se llama intereses, que a la larga hará que esa oferta acabe siendo nada irresistible.

¿Te imaginas por qué?

Otro día te lo cuento 😉

Lo dicho, el Viernes Negro puede acabar siendo muy largo.

 

Conclusión: el Viernes Negro es un arma de doble filo

 

Y llegamos al final del artículo.

La conclusión de todo lo que gira alrededor del famoso Viernes Negro es que, como todo en la vida, tiene su parte buena y su parte mala.

Hay que saber usarlo, hay que tener educación financiera para no liarla.

Si…

  • Tienes buenos hábitos
  • Has llevado a cabo una buena planificación de tu economía.
  • Tienes claro cuánto dinero tienes y cuánto puedes realmente gastar.
  • Y sobre todo, tienes clara la necesidad u objetivo de ese gasto.

…entonces puede ser un Viernes Negro glorioso. Sin duda.

Si simplemente te dejas llevar por todo lo que te he comentado y te rindes al desenfreno…

…no pongas mala cara cuando te recuerde esa frase tan repelente: “te lo dije”.

¿Entonces qué?

¿Caerás en los peligros del Viernes Negro o superarás la prueba de fuego?

 

Fotos de portada y artículo: Pixabay